19 May La etiqueta en las videoconferencias
Nada puede sustituir a los buenos modales, y estoy hablando en todas las circunstancias: en lo familiar, en lo social y en lo laboral. La etiqueta es un ingrediente básico para facilitar y armonizar nuestras interacciones diarias, y más que nunca las reuniones de trabajo.
Existen algunas viejas pautas para una buena etiqueta en las reuniones: llegar a tiempo, mantener el contacto visual, prestar atención, no interrumpir, preparar el tema a tratar. Estos mismos principios son aplicables a las videoconferencias, hoy tan frecuentes e indispensables.
La situación actual (no pienso describirla porque me deprimo) nos ha llevado a mantener contacto profesional a través de videoconferencias en las que llegan a participar de dos hasta decenas de personas. Para ello se cuenta con múltiples plataformas de comunicación, como Zoom, Skype, Google Meet, Webex, Microsoft Teams. y hasta whatsapp.
Hay quienes ya están familiarizados con estos formatos, sin embargo, hay muchos que los están utilizando por primera ocasión o con mayor frecuencia, lo que impone no solamente desafíos técnicos, sino también de organización.
Si eres de los que se está iniciando en este terreno, te recomendamos que pidas ayuda a aquellas personas que ya cuentan con mayor experiencia en el uso de herramientas de videoconferencia, o que busques algún tutorial en la web. Conocer el funcionamiento de la plataforma a utilizar te ahorrará mucho tiempo, disgustos y claro, también críticas.
Vamos con algunos consejos para lograr que una videoconferencia resulte no solo útil y productiva, sino también agradable y de buen gusto.
- Aspecto personal. Ten en cuenta que se va a ver tu cara de manera permanente en la pantalla. Si bien el encierro nos lleva a preferir ropa cómoda, esto no es sinónimo de aparecer hecho un desastre. Debes mostrarte presentable, como si estuvieras en tu oficina y si optas por pantalones cortos o pijama, por favor, no te pongas de pie.
- Recursos técnicos. Comprueba la velocidad de internet, pues esto será determinante para la calidad de la señal, sobre todo del video. Comprueba que el micrófono y la cámara funcionan correctamente, que están encendidos para garantizar que todos los asistentes puedan escucharte y verte cuando hables.
- Mantén el micrófono silenciado mientras no tomes la palabra, esto evitará que se produzcan ruidos molestos en la señal de audio y que se filtren situaciones indeseables (por ejemplo, los ladridos de tu perro). Si observas que alguien en la reunión está hablando, pero su micrófono está silenciado, puedes advertírselo por voz o a través de los sistemas de mensajes que tienen casi todas estas plataformas.
- Desarrolla un ambiente agradable. Organiza un entorno limpio, evitando distractores como un escritorio desordenado o decoraciones exageradas, esto reduce la posibilidad de que los asistentes se distraigan, debe de ser un área tranquila con un mínimo ruido y movimiento. Algunas plataformas cuentan con una función de fondo virtual, o de fondo difuminado, una manera fácil de eliminar las distracciones.
- Desarrolla una agenda previa. Como cualquier otra reunión presencial, contar con una agenda la hace más ágil y define la función de cada participante.
- Prepárate la reunión. Respeta la agenda, estudia los temas a tratar y organiza las relaciones entre los asistentes. Esto permite que la conferencia se mantenga en tiempo y forma y resulte más productiva.
- Contar con un moderador y/o anfitrión. Alguien tiene que conducir la reunión, ya sea el propio anfitrión o alguien previamente asignado. La regla general si eres el anfitrión: espera que todos los demás hayan abandonado la reunión antes de colgar, para que los asistentes puedan irse a su propio ritmo y recibir las últimas palabras antes de desconectarse.
- Presenta a todos los asistentes. Al igual que una reunión presencial o un evento social, no se inicia una conversación sin antes presentar a los participantes. La misma práctica se aplica a una reunión virtual, esto ayuda a crear un ambiente acogedor y estimular el compromiso.
- Elimina las distracciones. Las notificaciones de aplicaciones de mensajería, tonos de llamada y aplicaciones que se ejecutan en el escritorio del ordenador pueden distraer, lo que puede hacer que sus asistentes se sientan desconsiderados. Minimizar estas distracciones ayuda a mantener la reunión enfocada y libre de interrupciones. También conviene que adviertas en tu entorno que vas a iniciar una videoconferencia, para evitar las interrupciones de los niños.
- Mira a la cámara cuando hables. Si no miras la pantalla mientras hablas, parecerá que tu atención está en otra parte. El contacto visual directo con la cámara da a los asistentes la impresión de que los estás mirando, lo que crea un ambiente en el que todos se sienten involucrados y presentes en la conversación. Asegúrate de colocar tu cámara web y monitor a la altura de los ojos para conseguir esa conexión cara a cara.
Todo esto te ayudará a que las reuniones virtuales funciones y obtengan los resultados deseados. Practicar una buena etiqueta en las videoconferencias es fundamental para garantizar que tus encuentros sean profesionales, eficientes y valiosos.